Ahora que los tiempos electorales acucian. Ahora que pareciera ser que la imagen de la señora presidente se agiganta más y más cada día. Ahora que el adversario político se debate entre la incertidumbre, la propia incapacidad y la carencia absoluta de propuestas innovadoras. Ahora que hay un pueblo en las calles y una juventud involucrada en cuerpo y alma; se hace común apreciar el constante corrimiento ideológico de ciertos personajes hacia el peronismo. No así cuando las papas quemaban, al contrario. Y sabemos muy bien cuánto detestaron y detestan al peronismo y lo que este representa para el pueblo trabajador en su conjunto.
Y en estos tiempos de profundos cambios sociales parecería ser que estamos obligados a desayunar la hiel cotidiana que estos individuos van diseminando desde los lugares que usurpan con descaro.
Y es así como vemos a muchos "revolucionarios de café" embanderándose tras las filas de Cristina. A muchos artistas, empresarios, periodistas, mediáticos e intelectuales, participando en las marchas, como panelistas, opinando con rostros adustos, mostrándose en cuanto acto, festival o debate público se lleve a cabo. Entre los que se cuentan también a muchos de los que se empalagaron con las mieles menemistas, alineándose sin ningún prurito. Tipos que provocan asco con solo mirarlos, por su pasado complaciente, porque mientras el pueblo se cagaba de hambre ellos viajaban, trabajaban a destajo, cobraban en dólares, y se vanagloriaban de su vertiginosa inserción en el Primer Mundo y ahora...
Y es así como vemos a muchos "revolucionarios de café" embanderándose tras las filas de Cristina. A muchos artistas, empresarios, periodistas, mediáticos e intelectuales, participando en las marchas, como panelistas, opinando con rostros adustos, mostrándose en cuanto acto, festival o debate público se lleve a cabo. Entre los que se cuentan también a muchos de los que se empalagaron con las mieles menemistas, alineándose sin ningún prurito. Tipos que provocan asco con solo mirarlos, por su pasado complaciente, porque mientras el pueblo se cagaba de hambre ellos viajaban, trabajaban a destajo, cobraban en dólares, y se vanagloriaban de su vertiginosa inserción en el Primer Mundo y ahora...
... Ahora, por citar un ejemplo, puede vérselos recalar en la televisión pública. Y cuesta digerirlo, dado que durante mucho tiempo fueron parte del selecto staff de canal 13 o la Empresa Torneos y Competencias.
Por si no se recuerda costó mucho derogar la Ley impuesta por los militares. Y durante décadas fuimos cautivos de una programación planeada a estupidizar el inconsciente colectivo; imponiendo un modelo estético y condicionante e, incondicionalmente, marketinero y consumista.
E impávidamente nos tocó ser testigos de cómo, personajes mediocres, se hacían ricos y poderosos en un país cada vez más pobre y dividido. Tipos capaces de rifar a la madre por un punto de raiting o la permanencia exacerbada en la pantalla. Hoy nadie les toca el culo. Van y vienen. Hacen y deshacen. Y son siempre los mismos... Se han adueñado del medio y hacen pesar el nombre. Así nos fumamos a la diva del teléfono, al manduca alfajores de Bolívar, al sabático de los corchitos, al "Juan Palomo Yo la aso y yo la como" del Trece, al timbero de los domingos, etc... al fútbol excluyente... al de los códigos barriales que ahora curte vinos y habanos, y relata sus viajecitos por el mundo en su programa farandulero, a la lipoaspirada del Nueve... en fin, la lista es larga pero son los mismos de siempre los que cortan el estofado.
Y ahora que tenemos una televisión para todos lo menos que esperamos es ver caras nuevas, jóvenes talentosos, autores, productores, creativos, pibes que se prepararon para ocupar los espacios digitados. Y que equivocados estamos: Nada de eso ocurrió. Por el contrario, con el publicitado Fútbol para Todos nos siguen tocando el culo; ya han desembarcado los primeros contingentes de panqueques y advenedizos. Sí! Araujo, Tití Fernández, Marcelo Benedetto, Elio Rossi, Goycochea.. Además de actores, modelos y conductores. Personajes a los que no les faltó ni les va a faltar laburo en la actividad privada. A las que ahora les tenemos que bancar con nuestros impuestos sus sueldos porque ninguno de ellos trabaja gratis, además de ser caros. Como muchos, hubiese querido que la Televisión Pública se llenara de nuevos talentos y no con esta clase de personajes que ya están hechos.
Y jode mucho porque estaría bueno saber ¿quién carajo los contrata? ¿Cómo llegan? ¿Cómo y de qué vivían estos sujetos cuando el país se caía a pedazos, ya que conozco a miles de argentinos que se quedaron en las vías y nadie les dió una puta oportunidad, en cambio estos gatos siempre caen parados. No es nada personal, sólo que cansa ver siempre a los mismos. Por televisión, por cable, por radio, en periódicos y revistas. Año tras año, década tras década y gobierne quien gobierne.
Por si no se recuerda costó mucho derogar la Ley impuesta por los militares. Y durante décadas fuimos cautivos de una programación planeada a estupidizar el inconsciente colectivo; imponiendo un modelo estético y condicionante e, incondicionalmente, marketinero y consumista.
E impávidamente nos tocó ser testigos de cómo, personajes mediocres, se hacían ricos y poderosos en un país cada vez más pobre y dividido. Tipos capaces de rifar a la madre por un punto de raiting o la permanencia exacerbada en la pantalla. Hoy nadie les toca el culo. Van y vienen. Hacen y deshacen. Y son siempre los mismos... Se han adueñado del medio y hacen pesar el nombre. Así nos fumamos a la diva del teléfono, al manduca alfajores de Bolívar, al sabático de los corchitos, al "Juan Palomo Yo la aso y yo la como" del Trece, al timbero de los domingos, etc... al fútbol excluyente... al de los códigos barriales que ahora curte vinos y habanos, y relata sus viajecitos por el mundo en su programa farandulero, a la lipoaspirada del Nueve... en fin, la lista es larga pero son los mismos de siempre los que cortan el estofado.
Y ahora que tenemos una televisión para todos lo menos que esperamos es ver caras nuevas, jóvenes talentosos, autores, productores, creativos, pibes que se prepararon para ocupar los espacios digitados. Y que equivocados estamos: Nada de eso ocurrió. Por el contrario, con el publicitado Fútbol para Todos nos siguen tocando el culo; ya han desembarcado los primeros contingentes de panqueques y advenedizos. Sí! Araujo, Tití Fernández, Marcelo Benedetto, Elio Rossi, Goycochea.. Además de actores, modelos y conductores. Personajes a los que no les faltó ni les va a faltar laburo en la actividad privada. A las que ahora les tenemos que bancar con nuestros impuestos sus sueldos porque ninguno de ellos trabaja gratis, además de ser caros. Como muchos, hubiese querido que la Televisión Pública se llenara de nuevos talentos y no con esta clase de personajes que ya están hechos.
Y jode mucho porque estaría bueno saber ¿quién carajo los contrata? ¿Cómo llegan? ¿Cómo y de qué vivían estos sujetos cuando el país se caía a pedazos, ya que conozco a miles de argentinos que se quedaron en las vías y nadie les dió una puta oportunidad, en cambio estos gatos siempre caen parados. No es nada personal, sólo que cansa ver siempre a los mismos. Por televisión, por cable, por radio, en periódicos y revistas. Año tras año, década tras década y gobierne quien gobierne.
Por eso, y dadas las circunstancias del "hay que cambiar todo para que no cambie nada" sería muy saludable que se dictaran cursos acelerados de "Dedos en V" en Canal 7 para advenedizos y panqueques deseosos de participar en el reparto de una gran torta adornada con 50.000.000.000 de verdes velitas, o asegurarse una jubilación del Estado.
A ver si algo de lo Nacional y Popular que se agiganta por las calles del país se les pega sin hacerles fruncir la ñata, ni atragantarse ni "engrasarse"... O, lo que sería más correcto y digno: Hacerse a un lao... Maulas!
A ver si algo de lo Nacional y Popular que se agiganta por las calles del país se les pega sin hacerles fruncir la ñata, ni atragantarse ni "engrasarse"... O, lo que sería más correcto y digno: Hacerse a un lao... Maulas!
El Peronauta
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